Regresar

Interacciones de calidad y su impacto en el proceso de aprendizaje

Las interacciones son todos los intercambios que ocurren entre los equipos educativos y los niños/as durante los procesos de enseñanza y aprendizaje. Para entregar una educación de calidad, no solo debemos poner foco en qué es lo que enseñamos, sino que también en cómo lo enseñamos. Por tal razón, es muy importante que los equipos educativos desarrollen interacciones efectivas a los niños y niñas, ya que sus aprendizajes dependen en gran parte de la calidad de los intercambios dialógicos, que mantienen con los adultos/as y con sus pares en la escuela.

Existen diferentes tipos de interacciones, algunas están más relacionadas con lo pedagógico propiamente tal, otras con las dinámicas de organización dentro del aula, y otras están vinculadas al ámbito emocional. No es posible tener una relación productiva y efectiva en el aula hasta que se haya formado una conexión emocional entre las educadoras y los niños/as, ya que el grupo necesita sentirse seguro y acogido. Asimismo, las aulas pueden funcionar cuando se conocen bien las reglas y rutinas, es por ello que el constante apoyo instruccional de los equipos educativos en el aula contribuye a potenciar el aprendizaje.
Debido a esto, los equipos educativos se enfrentan al desafío de conocer el tipo de interacciones que implementan a diario y cómo estas pueden mejorar. Al descubrir qué es lo que se hace durante la jornada diaria para mejorar el intercambio de aprendizaje, podemos aprovechar al máximo todo el potencial que tienen nuestras prácticas pedagógicas para entregar una enseñanza de calidad.

Interacciones de calidad en la educación inicial

Promover las interacciones de calidad en el aula será fundamental para potenciar las oportunidades de aprendizaje, y para entregar una educación de calidad. La definición de calidad de la educación inicial ha sido discutida desde distintas perspectivas. Dentro de una noción más universal y normativa, se plantean dos conceptos principales: la calidad estructural y la calidad de proceso. Esta última, la calidad de proceso, se define por indicadores tales como las interacciones entre las niñas/os y sus educadoras y la relación que desarrollan los niños con el comportamiento de estas últimas. Algunos atributos importantes que deben caracterizar a las interacciones de calidad son: calidez, frecuencia, un alto grado de reacción, que incluyan a todos los niños y niñas presentes, con mucha comunicación verbal, y que minimicen la interrupción o interferencia cuando los niños/as se encuentran concentrados en explorar.

Según el estudio Calidad de las Interacciones entre Educadoras y Niños/as en Jardines Infantiles Públicos en Santiago (Gebauer y Narea, 2021) las interacciones al interior de las aulas preescolares no solo son importantes, sino que son en esencia aquello que define la calidad de la educación temprana. En su investigación, basada en el instrumento  Classroom Assessment Scoring System para el nivel Toddler (CLASS-T), el análisis descriptivo indicó que tanto el dominio Apoyo Emocional y Conductual como el Compromiso con el Apoyo al Aprendizaje obtuvieron un nivel de calidad moderado, mientras que las áreas de Desarrollo y Modelaje del Lenguaje, y la Calidad de la Retroalimentación obtuvieron un nivel de calidad débil.

La investigación concluyó que aun cuando se cuente con una intervención de calidad, la mayoría de las aulas intervenidas se mantienen en un bajo nivel de calidad general. Es por ello que se hace necesario seguir indagando sobre programas de acompañamiento u otro tipo de intervenciones, como comunidades de aprendizaje, que permitan ir mejorando la calidad de las interacciones.

¿Qué tipo de interacciones podemos fomentar en el aula?

De acuerdo al modelo CLASS-T es necesario promover 3 tipos de interacciones en el aula:

Interacciones de Apoyo Emocional. Para motivarse y asumir desafíos los niños y niñas necesitan que les ayudemos a sentirse cómodos/as, seguros/as y a desarrollar vínculos de apoyo cercanos, tanto con su grupo de pares como con los equipos educativos. En las aulas donde se generan estas condiciones, ellos/as aprenden más y desarrollan habilidades emocionales y sociales para un desarrollo integral.

Interacciones de Organización del Aula. Cuando los niños y niñas son capaces de regular su atención, su propia conducta, seguir instrucciones y además, los equipos educativos logran mantenerlos involucrados/as en las experiencias de aprendizaje, el grupo puede aprovechar al máximo las diferentes instancias para aprender, ya que no se pierde tiempo manejando la conducta y disminuyen las distracciones e interrupciones.

Interacciones de Apoyo Pedagógico. La idea es que las aulas sean entornos que promuevan constantemente el lenguaje porque los niños y niñas necesitan estar expuestos/as a escuchar y usar nuevas palabras para desarrollar habilidades lingüísticas y de vocabulario, las que a su vez les permiten aprender y desarrollar óptimamente otras habilidades académicas y sociales. Además, estas interacciones son importantes porque les permite comprender los conceptos en profundidad y con ello resolver problemas usando habilidades de razonamiento y creatividad, en lugar de solo repetir o aprender de memoria.

Interacciones y bases curriculares

De acuerdo a las Bases Curriculares de la Educación Parvularia (BCEP), resulta fundamental el rol de la educadora como líder del proceso educativo, imprimiendo en cada acción, habilidades, disposiciones y conocimientos que posibiliten interacciones positivas y favorecedoras del bienestar de toda la comunidad educativa, ya que educar también contempla el respeto y valoración del niño y niña en su desarrollo. Educar es un proceso de transformación en la convivencia.

Las BCEP mencionan varios elementos que definen o determinan las interacciones pedagógicas que promueven aprendizajes. La Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) elaboró un documento que presenta a las interacciones como el eje central de la educación y la sociedad (2022) y en él señala que dentro de los elementos de la BCEP para interacciones pedagógicas podemos encontrar:

– Promover la participación activa de niños y niñas, donde principalmente se invita a valorar y validar la opinión de los párvulos, así como, a resignificar los ambientes de aprendizaje desde la participación de estos.
– Construir vínculos afectivos positivos y estables, que permita a los niños/as sentirse queridos, seguros y aceptados por los adultos que los rodean.
– Las interacciones entre el o la educadora y los párvulos y entre los niños y niñas deben tener como base un conjunto de normas relacionadas con el respeto mutuo, en la forma y en el fondo.
– Frente a un conflicto cotidiano, la y el educador debe promover el diálogo, la empatía y la comprensión.
– La educación de los párvulos implica por parte del equipo pedagógico, asumir su rol fundamental como mediadores de aprendizaje.
– Construir un clima positivo de relaciones en el establecimiento. Son las relaciones positivas las que contribuyen a potenciar a los seres humanos.
– Promover la participación activa de niños y niñas, donde principalmente se invita a valorar y validar la opinión de los párvulos, así como, a resignificar los ambientes de aprendizaje desde la participación de estos.
– Construir vínculos afectivos positivos y estables, que permita a los niños/as sentirse queridos, seguros y aceptados por los adultos que los rodean.
– Las interacciones entre el o la educadora y los párvulos y entre los niños y niñas deben tener como base un conjunto de normas relacionadas con el respeto mutuo, en la forma y en el fondo.
– Frente a un conflicto cotidiano, la y el educador debe promover el diálogo, la empatía y la comprensión.
– La educación de los párvulos implica por parte del equipo pedagógico, asumir su rol fundamental como mediadores de aprendizaje.
– Construir un clima positivo de relaciones en el establecimiento. Son las relaciones positivas las que contribuyen a potenciar a los seres humanos.

Por último, no olvidemos que es importante poder medir realmente la calidad de estas interacciones, la Subsecretaría de Educación Parvularia puso a disposición de jardines infantiles y escuelas la Herramienta Trayectoria Profesional para la Mejora Continua (HTMC), que tiene como objetivo central mejorar la calidad de las interacciones y así, mejorar las prácticas pedagógicas.

Fundación Educacional Oportunidad en colaboración con el Laboratorio de Innovación en Educación de la Universidad Católica de Chile, creó un espacio -totalmente gratuito- en nuestra plataforma de educación en línea, donde podrás encontrar recursos y una videoteca de interacciones pedagógicas para apoyar a los equipos educativos en el desafío de generar interacciones más efectivas en el aula.

 

Si quieres conocerlas visita aquí

Artículos relacionados

Somos un equipo profesional de educadoras de párvulos, docentes y profesionales de la educación que desarrolla cursos de formación continua e-learning para transferir los aprendizajes, recursos y metodologías educativas que han sido probadas en terreno por cientos de equipos directivos y educativos durante los más de 15 años de existencia de la Fundación.